El BIM en obra ya es una realidad. Los últimos avances tecnológicos centrados en el uso de los dispositivos móviles para facilitar y mejorar la comunicación a los agentes de obra han empezado a dar sus frutos. Distintas aplicaciones que no hace mucho iniciaron su trayectoria son ya una realidad y su uso ya se empieza a visualizar en muchas obras: es un avance imparable y otra pieza muy a tener en cuenta en el actual engranaje de digitalización del sector de la construcción.
BIM EN OBRA. ESTADO ACTUAL.
Cuando desde el sector de la construcción miramos a otros sectores y queremos analizar y comparar nuestro estado del arte en referencia a la utilización de las nuevas tecnologías siempre solemos estar en desventaja. En sectores como la restauración, la logística o el comercio, la utilización de los dispositivos móviles por parte de los operarios y responsables es toda una realidad. Desde el camarero al repartidor, todos gestionan la información necesaria para realizar su labor con una tablet o desde un móvil. Esto no sólo les facilita el trabajo sino que con ello alimentan al sistema de la compañía con los datos necesarios que automatizan otros trabajos de gestión. Trabajos que antes había que hacer manualmente. Y además de ello, permite la realización de análisis posteriores que ayudaran a la mejora de decisiones en la administración del negocio.
En muchas ocasiones, en el sector de la construcción se incurre en retóricas siempre focalizadas en un temor al avance: «esto no servirá», «es que cada proyecto es diferente», «es muy complicado», «no veo a los operarios haciéndolo». Y así una larga lista de apriorismos que no dejan de reflejar un claro miedo a lo nuevo y a lo desconocido. Quizá llega el momento de romper esas barreras, y dando un primer paso los beneficios que aportan estos enfoques superan con creces los inconvenientes.
Ahora bien, si se pretende hacer una reflexión acerca de la forma actual de realizar las comunicaciones y si esta se puede mejorar, en primer lugar, los agentes del sector se deben de preguntar la cantidad de tiempo que pierden a diario leyendo emails, sintetizando información, tiempo perdido en descargar y gestionar archivos en su propio directorio, etc…, luego el tiempo perdido en contestar los mails recibidos, tiempo perdido en tener que hacer informes después de ir a la obra, hacer fotos, tomar notas, volver a la oficina y así un largo etcetera. Teniendo en cuenta esta realidad, es muy posible que determinados aplicativos y enfoques puedan ayudar y mucho a mejorar todos estos procesos comunicativos existentes entre los diferentes agentes.
ENFOQUE DE LAS DIFERENTES HERRAMIENTAS DE SOFTWARE.
En enfoque de estos aplicativos se centra en aglutinar toda la comunicación que se genera durante la fase de ejecución de obra. También, muchas de ellas, al estar en entorno de nube proporcionan el espacio necesario para almacenar todos los archivos y documentación y complementarlo como un entorno de CDE. De esta forma se puede indicar que proporcionan un entorno único de comunicación y proporcionan el entorno único de compartición documental para que en general se mejore la eficiencia en la comunicación.
Estas herramientas, pueden o no estar basadas en BIM. Muchas de ellas (FinalCAD, PlanGrid, PlanRadar …) nacieron en un contexto de partir de información “tradicional” y no basada en modelos BIM. En donde la información de proyecto se centra en gestionar muy bien los diferentes planos (en pdf) y el control de las versiones de los mismos procurando que todos los agentes dispongan siempre la información más actualizada en un entorno que les permita hacer comentarios, proponer tareas, indicar incidencias, hacer partes de obras y demás temas. Estos aplicativos y sin estar basados propiamente en leer información de modelos BIM sí que tienen un lema común = reducir y mucho la carga de emails que entre los diferentes agentes de la obra se mandan entre sí y por lo tanto mejorar la eficiencia en la comunicación, con el consiguiente gran ahorro de tiempo en las tareas diarias de interacción.
Una de las claves de su éxito es la facilidad de uso y la funcionalidad. Además es necesario entender que el proceso de digitalización y mejora de los procesos no solo se refiere a utilizar un prototipo virtual (modelo BIM) sino que para digitalizar el sector hay muchos engranajes y partes a transformar y mejorar, y sin duda alguna la comunicación entre los distintos agentes de obra es uno de los más relevantes a tener en cuenta.
EVOLUCIÓN Y PERSPECTIVAS FUTURAS
Plataformas como Dalux, el nuevo Autodesk Construction Cloud Build (con la integración de PlanGrid por parte de Autodesk), la paulatina integración de ProjectWise con Syncrho Pro por parte de Bentley y otras herramientas como BIMSync, usBIM Plattform han iniciado con una diferente velocidad el camino de disponer bajo el mismo contexto de herramienta de comunicación e interacción entre agentes de obra utilizando la información directa de los modelos BIM más allá de los planos.
Esta evolución corresponde al hecho de que, si un proyecto ya se ha realizado bajo un contexto de metodología BIM, con elementos perfectamente encajados en el proyecto y ricos en información, esos datos se aprovechen como base informativa para poder proporcionar ahora a todos los agentes, a esta comunicación integrada, muchas más información y de más calidad, permitiendo la combinación de nuevas tecnologías como la realidad virtual o aumentada, y una mayor capacidad de gestión de información (metadatos) desde muchos puntos de vista
En la medida que otras tecnologías paralelas empiezan ya despegar, como el caso del 5G, el IoT (Internet of Things) la utilización de los gemelos digitales en la fase de construcción bajo un contexto colaborativo y digital implicaran a todo el sector una gran mejora en los procesos de gestión de información y comunicación durante la fase de construcción aprovechando en paralelo las mejores tecnológicas globales que ya se empiezan a vislumbrar
Ya es el momento de empezar a aplicar estas nuevas tecnologías. Cualquier atraso en el inicio de la utilización de este tipo de plataformas, puede implicar en un futuro decalaje tecnológico y competitivo con respecto a otras empresas que ahora ya están dando sus primeros pasos firmes